Domingo,
12 de junio de 2016
Ayer
entre en SUECIA, tempranito, para aprovechar el día.
Un día que comenzó bien, con un un cielo de un color azul eléctrico
perfecto presidido por un tremendo sol. Accedí al país a través
del puente que atraviesa el estrecho de Oresund. El tren lo hace a
través de un túnel, bajo el agua.
En
Malmö fuí al grano. La torre Turning Torso, de Santiago
Calatrava se presentaba de este aspecto
aunque
siendo de Calatrava no es de extrañar que el acceso al interior
estuviese cubierto por un andamio, con un cartel que lo excusaba por
limpieza de la fachada. - ¿alguien tiene dudas?
El
segundo acto tiene lugar en Lund. Un
paseo por el centro y visita a la catedral y a la inmensa
cripta que esconde, la más grande que se puede encontrar en el país.
El
día se estaba desarrollando de forma perfecta. Mientras yo como buen
turista iba de un lado para otro, el personal autóctono pasaba el
día del Señor descansando al sol en los bancos de la plaza.
Curiosamente se encuentran todos juntitos y muy bien orientados. Para
que ordenarlos alrededor de la plaza como en la mayoría de plazas,
si su función la hacen mejor así
Y
contento y alegre – tran lará - puse rumbo a Goteborg. Pero la
autopista, aunque gratuita, es muy aburrida, y el sueño es un gran
cabrón que te va mordisqueando poco a poco. Y antes de que me
hiciese sangre tuve que parar.
Aprovechando la coyuntura, intenté conectarme al internet del Sr. McDonalds, que casualmente estaba por allí. Pero por tres veces el ordenador se colgó totalmente. Desesperado ante la inoperancia de mi fiel escudero, lo arranqué del enchufe y lo escondí fuera de mi vista por no tirarlo por la ventana.
Para calmar los ánimos nada mejor que llenar la barriga y una contundente siesta de hora y media.
Un buen café al levantarme y a la ruta. La carretera de la costa fue la alternativa al problema matutino. Pero el día parecía que se iba torciendo poco a poco. 2 horas de conducción para escasos 100 kilómetros, y solo 30 segundos de vistas sobre el mar. Eso no es una carretera costera, es una moto. Visto el plan, vuelvo de nuevo a la autopista para entrar finalmente en Goteborg. Y esto fue la debacle. Entrando a las 19,30 h en la ciudad y tras 2 horas dando vueltas y jugando con un pequeño plano a encontrar aparcamiento, tal gesta me fue imposible. Puede ser que mi entendi- miento y visión estuviesen cansados, quizás agotados, pero lo que es real es que en todos los rincones de la ciudad el aparcamiento es de pago, y el que no, está limitado a un par de horas. Los más benevolentes dejan libre el turno de noche, cosa que para mi es totalmente insuficiente. Lo intenté en el centro, en la zona portuaria, en el extrarradio, incluso en urbanizaciones a más de 20 kilómetros de centro, pero en todos lados igual: pagar, pagar y pagar !!!!. Así que a las 21,30, agotado y deprimido decidí abandonar una ciudad que prometía y que estaba de fiesta, y aunque era la fiesta del “Orgullo Gay” tenía muy buena pinta.
El día acabó para mi a las 3 de la madrugada, tras un par de películas, unos gusanitos, un paquete de cacahuetes y unas cervezas. Esto no es Red Bull pero reanima el espíritu considerablemente. Y a estas horas intempestivas pude apreciar que lo que cuentan los viejos de lugar y la wikipedia es cierto. En verano la noche no existe. Después de ir observando como se ponía el sol, el horizonte seguía manteniendo una luz brillante y clara, y a las 3 de la madrugada comenzaba un nuevo amanecer.
Lunes,
11 de junio de 2016
Estoy
en Trollhatan, remarcable porque por aquí pasa el canal
navegable que atraviesa el sur de Suecia, y por unas cataratas en el
centro del pueblo. Pero el día tampoco ha ido bien. Ni he encon-
trado la oficina de turismo ni la ruta en bici que lleva hasta el
gran lago Vänern, de 130x65 km.
2
veces me he perdido, y vencido por las circunstancias he desistido
en el intento.
Tras un sencillo paseo por el pueblo y una visita a la inexistente cascada han acabado conmigo.
La cascada solo “funciona” una vez al año, cuando abren las compuertas de la presa, pero el resto del año el agua es canalizada a las centrales hidroeléctricas.
Casi llegando a casa, he visto un panel informativo donde marcaba la Oficina de Turismo. Ni era el momento ni quedaban ganas. Ya volveré otro día, u otro año, o que le den.
Así
que estos han sido mis dos días en Suecia, poco o nada. Espero que
a la vuelta el país me de alguna alegría, aunque sea pequeñita. No
solo de suecas altas y rubias puede vivir el hombre.
Y
mañana a Noruega.
Jueves,
23 de junio de 2016
¡¡¡
Hoy es la verbena de S. Juan !!!, y yo sin acordarme. No tengo ni
petardos, ni coca ni cava. Bueno, ayer me dí un homenaje de
categoría, así que pensaré que la verbena fue ayer, y sin más.
Dos
días seguidos de fiesta no es bueno ni para el colesterol, ni para
el hígado, ni para la despensa.
Esta
noche es la más corta del año, cosa que aquí tampoco se va a
notar, - ¡si no hay noche!- .
Han
pasado unos cuantos de días, y la información se apelotona en mi
cabeza, aunque con la perspectiva del tiempo, solo va quedando en la
superficie aquello de más impacto.
La
primera parada remarcable en NORUEGA fue Oslo. -
¡Venga, a lo grande!-.
Lo
primero que me llamó la atención fue la cantidad de turistas, con
uniforme de turistas, que invadían las calles. - ¡ Han
comenzado las vacaciones ! -.
Los
cruceros van y vienen, con hordas de turistas que lo arrasan todo,
con gran cantidad de asiáticos que lo acaparan todo, con sus ruidos
y sus modales. También se hacen notar franceses y algunos españoles.
A estos últimos los escucho hablar escudado en mi anonimato y me
siento como un ladrón de palabras, pero oir hablar en castellano
reconforta.
Ya
hemos dejado a los cuadriculados alemanes y a los estrictos y
normalistas daneses, y por fin he vuelto a unos hábitos más
reconocibles. Ya me puedo saltar los semáforos de peatones en rojo.
Cruzo la calle a mi antojo, cuando y por donde quiero, y nadie me
mira mal. Es la normalidad. Los noruegos de Oslo tienen un punto más
canalla que sus vecinos nórdicos. Se ve en su forma de conducir. Son
mas “valientes” en rotondas, les gusta tocar el claxon, los
acelerones y hacer rugir a sus potentes vehículos, que aunque no en
el porcentaje de Alemania, también se dejan ver.
Hay
que saber que Noruega puede que sea el país mas rico de Europa,
aunque solo es país inde- pendiente desde 1905. Hasta la década de
1960 fue uno de los países más pobres del continente. Pero la vida
les ha cambiado a partir del descubrimiento de petróleo en sus
costas. Y ahora son los nuevos ricos, con los mejores servicios
sociales y culturales de Europa, pero también con los precios mas
altos. Pero todavía se pueden encontrar en los habitantes de la
ciudad detalles de un provincianismo acumulado durante décadas.
Pero
centrándonos en la ciudad en sí, se observa más tráfico, a pesar
de que gran parte circula bajo tierra por multitud de túneles,
alcanzando alguno los 6 kms. Hay muchas menos bicis y carriles
adaptados. Los mendigos se reparte por todas las esquinas de la
ciudad, y el buen rollo de fiestas, pic nics y botellones que hasta
ahora había visto por los parques de Alemania y Dinamarca se ha
acabado. -¡ Está prohibido beber alcohol en la calle!-.
Ahora
las botellas de cerveza han sido sustituidas por botes de bronceador.
Aprovechando el más mínimo rayo de sol, cualquier trozo de césped
es invadido por los bikinis. Hasta en la puerta del Parlamento.
Justo
al otro lado de este pequeño jardín se encuentran los baños
públicos, normalmente gratuitos.
Éstos
en concreto hacen referencia expresa a Francia, aunque desconozco su
significado.
Comenzemos
la ruta por el Ayuntamiento, una mole de ladrillo en estilo
funcionalista, tan de moda en las décadas de los 50 y 60 en toda
Europa.
Su
discutible belleza externa queda compensada con un interior de salas
y salones bellamente decorados con murales de artistas de la época,
incluido Eduard Munch. En este salón se entrega el Premio Nobel de
la Paz. El resto de premios se entregan en Estocolmo, Suecia.
Oslo
es una ciudad sin historia relevante, de reciente desarrollo y en
continua expansión. No hay monumentos con solera, ni catedrales
llenas de tumbas, polvo y telarañas. Lo que más destaca son sus
modernos edificios. Una arquitectura vanguardista y de diseño que
está acaparando todo el frente marítimo del centro de la ciudad.
El
edificio de la ópera, situado frente a los anteriores, se atreve
incluso, a hundir sus cimientos en el fondo del mar, y algunos han
llegado a encontrarle cierta similitud con un iceberg.
El
paisaje urbano está sembrado de grúas, aunque no logran robarle la
belleza a la zona de Bryggen. Es el puerto antiguo, y en el lugar
donde se encontraban los antiguos astilleros, hoy surgen modernos
edificios de viviendas y oficinas, y es el lugar de moda de la
ciudad. Locales de restauración muy variados y comercios del marcas
punteras rematan la oferta de ocio, junto todo tipo de ferrys que
reparten personal por todos los rincones de la bahía. Una bahía
salpicada de centenares de islas e islotes. También hay lugar los
veleros, que quedan estupendos en la foto.
Y
cuando se pone el sol, y la noche se pelea con el día, la imagen que
queda es inolvidable
Otros
lugares destacables son el Parque Vigeland, donde el Sr. Vigeland, un
escultor noruego famoso en su país, se ha bastado el solito para
decorar el parque con más de 200 esculturas, destacando un monolito
de granito de 14 metros. Vale la pena ampliar la foto para ver el
detalle.
También
hay museo de arte, imprescindible en una capital que se precie. Es la
Galería Nacional, donde la atracción principal es una sala dedicada
a Munch, y a pesar de tener museo propio, su obra más famosa se
encuentra aquí: “El Grito”
Yo
me quedo con la pequeña península de Bygdoy, a 6 kms del centro,
donde se comienza a vislumbrar la autentica Noruega de bosques y
agua
y
donde se concentran los museos de temática naval, que muestran el
espíritu aventurero noruego:
-el
Museo del Fram encierra en su interior el barco del explorador ártico
Admunsen
-el
Museo de Barcos Vikingos guarda auténticas joyas con 1200 años de
antigüedad
Los
vikingos, que surcando los mares llegaron hasta Canadá, saquearon
Sevilla y comerciaron en Siria, también arrastraron sus naves por
media Rusia para llegar al Mar Negro. Unos campeones.
La
cultura vikinga no ha quedado relegada a los museos, sino que se
puede apreciar en muchos detalles de la vida cotidiana y en muchos
lugares. Uno de ellos es en la arquitectura de las iglesias más
antiguas, todo madera. Una de las más importantes y bellas del país
está en Heddal.
Pero
una vez abandonada la capital y su zona de influencia, la imagen del
país cambia totalmente. Ahora los pequeños pueblos, las granjas y
las cabañas se adaptan a la naturaleza. Los bosques y los campos
verdes son el paisaje dominante, con el agua como principal elemento
decorativo. Ésta se presenta de mil maneras: lagos, cascadas, ríos,
fiordos, y todas en abundancia y en tamaño XXL.
El
pueblo de Rjukan se sitúa a la puertas del Parque Nacional
de Hardangervidda, el más grande del país. Y con la
tranquilidad de tener un área de servicio gratis para cambio y
suministro de agua, solo queda instalarme. Esto de las áreas de
aguas se ha convertido en una constante. Todos los pueblos tienen la
suya, y gratis. Otra cosa son los parkings para las autocaravanas,
que son de pago, y el más barato150 coronas, unos 16 euros. Así que
yo sigo con la política de aparcamientos alternativos. La cronología
de mi estancia aquí se puede resumir así:
-Primer
día: subir en el teleférico, con bici incluida, para hacer la Ruta
de Hardangervidda. Una super ruta circular de 85 kms que recorre toda
un altiplano, mas pelado que el ….., lleno de lagos y de cabañas
De
postal, con un día soleado pero con viento en contra y con un
continuo sube y baja, por lo que los primeros 30 kilómetros fueron
una paliza: 3,30 h. Los segundos 30 se dieron mejor, era todo
bajada. Y los últimos 25 ya se pusieron bastante pesados: me dolía
la espalda, los riñones, las rodillas, las ideas,.... En los últimos
10 me paré por lo menos tres veces. Pero ahora solo me acuerdo de lo
bueno (-¡mentira!!!- ).
-Segundo
día: estuvo lloviendo, así que en casita revisando fotos,
preparando la ruta más inminente, unas pelis,.... vamos, un día de
sofá.
-Tercer
día: cambio de domicilio al parking del monte Gausta. Una buena
subida de 2 horas por un pedregal sin una triste flor. Pero el premio
fueron unas vistas de 360º al infinito.
Un
infinito dibujado por unas montañas nevadas y entre ellas y yo miles
de lagos.
También
se puede subir en un cremallera por un túnel que fue secreto hasta
2010, y que construyó la OTAN para llegar a la fea antena que hay en
la cumbre. Pero la comodidad son 350 nok / 40 €
-Cuarto
día, miércoles 22: toca movimiento. Cambio de agua y ruta.
Como
curiosidad, y antes de irnos, un poco de historia. Durante la 2ª
Guerra Mundial, los alemanes fabricaban en el pueblo algo llamado
“agua pesada” utilizado para la fabricación de armas atómicas.
Y lo hacían en una planta de energía hidráulica que fue
bombardeada sin éxito por los aliados, y que finalmente los miembros
de la resistencia noruega consiguieron volar. Estos hechos están muy
bien reflejados en la película “Los héroes de Telemark”. Y este
es el lugar, con la posibilidad de subir hasta la cima de la montaña
siguiendo las gigantescas tuberías de agua, si consigues superar
los 4000 escalones.
La
carretera Rjukan – Odda son
200 kilómetros de puro espectáculo de paisaje cambiante. No
hay momento para el aburrimiento y sí muchos para estrellarse si no
se va con cuidado. El cuello se gira más que viendo bikinis en Oslo.
Primero unos prados sembrados de casitas y cabañas, con los tejados
sembrados de césped, que aísla mejor de la nieve.
Y
la cosa va ascendiendo poco a poco para encontrar montañas nevadas.
En la parte más alta la nieve se encuentra en ambulancia, y los
lagos semicongelados me sirven para otra postal.
Y
para salvar los últimos metros de montaña con pasos demasiado
nevados, los muchachos han estado picando roca durante no se sabe
cuanto tiempo. Un colección de túneles inacabable, unos largos de 6
kms, otros cortos de 200, otros en espiral, uno que sube y otro que
baja. Y una vez pasadas las montañas, toca bajar, y bajar, y
bajar....y volver a bajar. Y el valle se va estrechando, y el río
convirtiéndose en espumosos rápidos, con nubes de agua pulverizada
y un sonido ensordecedor. Las cascadas incontables se descuelgan a
ambos lados. La más bonita es Latefoss, una cascada doble y
bífida.
Y
llegamos a Odda, el pueblo que se asienta en el fondo del
fiordo Hardanger. Pero no en el fondo del mar con Bob Esponja,
si no en el otro fondo, lo que viene siendo al final del fiordo.
Ha
sido una larga jornada de conducción. Nunca encontraba el lugar
ideal para instalar el campamento, y tirando tirando, al final he
llegado a la ciudad.
Comienzo
a comer a las 17h. En el planing toca patatas fritas y longaniza de
Aragón, que esta vez ha sido a la plancha, no al vino. El vino me lo
he bebido, y un par de copas más. Luego he caído en la cuenta que
el día siguiente es la verbena de San Juan. Pues yo ya la he
celebrado un día antes. Total, aquí nadie se va a dar cuenta.
La
ciudad no tiene nada de especial, solo su situación privilegiada,
sus vistas.....
pero
está bien pertrechada para el turismo, con supermercados,
gasolineras, restaurantes, una buena oficina de turismo y varias
empresas de taxis que te llevan al inicio de la ruta a Trolltunga (La
lengua del troll), el mayor atractivo de la zona. Se trata de un
saliente de roca en forma de lengua, que cuelga de una pared a 600 m
de altura en caida libre sobre un lago. La broma son 23 km y 12 horas
de marcha. Finalmente, después de haberme mareado con los precios de
los taxis, el tiempo prometía varios días de lluvia, y he tenido
que descartar la excursión. Otra escusa más para volver.
El
jueves amanece nublado, así que decido pasarlo tranquilo en Odda, de
paseo, arreglando fotos, el blog, …. y el viernes que va a llover,
aprovechar para moverme. Pero el tiempo es muy caprichoso, y despeja
a mediodía. A pocos kilómetros tengo una excursión de 4 horas,
para ver unas cascadas. Como rápido, recojo y me pongo en marcha.
Hay que aprovechar las oportunidades.
Las
4 cascadas de Husedalen están en Kinsarvik, a donde se
llega por una carretera sinuosa y bastante estrecha bordeando todo el
rato el fiordo.
Jamás
he visto tanta agua salvaje, a excepción de Iguazú. Que burrada,
que tamaño. Te puedes sentar a la orilla de la cascada.... o en el
borde del precipicio, a gusto del consumidor.
¡Feliz
y contento!
Y
las cascadas siguen apareciendo en estas tierras, como las setas en
otoño. Un poquito de agua y....
Y
de aquí a Bergen. Y a partir de ahora no me voy a enrollar mucho.
Casi no puedo levantar el brazo para escribir. Tengo una posible contractura tirando a tendinitis en el omoplato, lo que viene siendo la paletilla, de las de libro.
Duele mucho, hasta sin moverme, y va para 10 días que la arrastro,
por lo que no he tenido más remedio que sacar las pastillas. Las he
probado de todas formas, de una en una, de dos en dos, en ensalada,
en bocadillo, con agua, con zumo, con vino y hasta con whisky. Pero
ahí sigue.
Pero
no querría acabar la crónica sin explicar la bienvenida que me dio
la ciudad de Bergen.
Lo
tenía todo controlado para llegar con tiempo, encontrar aparcamiento
y comer. Así tendría toda la tarde libre para ambientarme antes de
ver el partido de España – Italia. Pues, ya dentro de la ciudad,
en lo alto de uno de los muchos cerros que rodean el centro, a 5 km
de mi destino, pinché una rueda. Eran las 14,30 h. Tras muchos
contratiempos demasiado largos de contar, tener que llamar al seguro
y apañármelas con un gruísta noruego, volvía a estar operativo a
las 18,30h.
Sin
haber comido, sin saber donde poder aparcar, pero al menos me ahorré
el disgusto de la derrota.
Pero
la cosa fue a peor al día siguiente, cuando intenté arreglar el
pinchazo, que acabó siendo una rueda nueva y una broma de 360 €.
Por un momento se me quitaron todos los dolores del brazo. Solo me
dolía la cartera.
Y
ahora os dejos con unas bellas instantáneas de Bergen, porque no
puedo seguir escribiendo, los dolores son de parto.
El
muelle antiguo, el famoso Bryggen, Patrimonio de la Humanidad
donde
además de tiendas de souvenirs también hay lugares para el
esparcimiento
También
hay lugar para el diseño vikingo
y
para la gastronomía, que se concentra en el el Mercado del Pescado,
donde hacen el agosto con los turistas, y donde se puede conseguir
carne de ballena, fresca o ahumada. Es lo negro... y claro que la he probado.
Y......esto
es to to to to todo amigos !!!!
“Como
todas las drogas, viajar requiere un aumento constante de la dosis."
John
Dos Passos
PD: Y desde aquí quiero volver a felicitar a mi amigo Jordi Asensio, que ha sido abuelo por primera vez.
Hol Pajaro , vaya viajecito te estas metiendo entre pecho y espalda .,... no todo van a ser bellas postales paisajísticas, con tantos días de viaje algún contratiempo siempre ha de salir; pero en la balanza del viaje los momentos buenos pesan muchísimo mas que los malos.
ResponderEliminarSigue cultivando y ampliando tu extensa cultura y agrandando los ojos cada vez que veas una maravilla de la naturaleza de esas que rondan por tierras escandinavas.
Gasta mucho cuidado y pocos euros.....
Hola tete, bienvenido
EliminarDebe ser de de eso que me duele tanto la espalda...
Uno se mentaliza para esperar contratiempos, pero tantos y tan seguidos joden un poquito la moral, aunque ésta se recarga facilmente con el sol. Pero cuando llueve, volvemos al bajón.
De tanto abrir los ojos ante esta naturaleza se me van a quedar redondos redondos como los de los dibujos japoneses.
Y cuidadito ya gasto, pero aun apretándome el cinturón y sacando mi vena más catalana, gasto más dinero. A pesar de que son el país más rico de Europa, aún quieren más, y se quieren quedar con todo mi dinero.
Estoy un poco quejicoso, ya lo se, pero así me desfogo un poquito. aunque no dudes que voy disfrutando de lo lindo.
EliminarEs un infierno intentar colgar cualquier comentario! Lo he intentado desde el ordenador, desde el teléfono... ya ni siquiera sé qué quería poner... mierd!
ResponderEliminarSiempre surge algún contratiempo, no voy a ser yo solo al que le surjan los contratiempos.
EliminarLuego me lo cuentas. Besos
Me encanta tu viaje Bicho. Y leer lo que cuentas es un placer. Gracias.
ResponderEliminarUn millón de besos desde el horno madrileño.
Marina
Gracias chiquilla, se agradece que alguien se asome por aquí de vez en cuando, y si es con algún elogio mejor.
EliminarTu en un horno y yo en una ducha, aunque se va rebuscando el sol por donde se puede, pero el forro no ay quien se lo quite.
Saludos y gracias.
Venga arriba ese ánimo !!!! Dentro de poco no dormirás nada de nada, será todo luz, luz y más luz...nosotros el finde del 15 tampoco dormiremos na de na, así que estaremos como tú, con los ojos bien redondos !!!!
ResponderEliminarMi niño, se me cuide mucho y disfrute al máximo. Y ten cuidadito con esa paletilla...pomadita por aquí, pomadita por allá...
Y ya queda menos para que tengas visita de la buena, así que guarda fuerzas.
Te envío muchos besicos de Fresa y un poquito de mi
Hola amigo
EliminarEl ánimo está ahí, lo que pasa es que está cabreado y dolorido. Ya voy durmiendo poco, pero ya lo hacía antes.
Yo sigo durmiendomis 6 horitas: 00 - 06 am, hora arriba/hora abajo.
Tener cuidadito con las fiestas, con con esas edades que gastais, más que un mareo y una lipotimia, está más acorde un ataque al corazón. ¡¡¡ ja, ja. ja!!!
Espero que os divirtais mucho, y tu por partida doble, te toca hacerlo también por mi, y la primera que te tomes que sea a mi salud. Aunque espero vernos unos minutos a través del skipe, así que ponerle ganas al intento.
La paletilla a curándose, pero a este ritmo va a salir ibérica de 5 J. Está necesitando mucho tiempo, más del deseado, para curarse. Estamos asi igual que al principio, pero con 3 cajas de pastillas en el cuerpo.
Paciencia y reserva.
Gracias, muchas gracias,.....
Cari, la paletilla es como la mancha de la mora... con otra paletilla se quita. Así que en pocos días voy pallá y te dejo seco.
ResponderEliminarTu paleta que tañora
OLE !!!
ResponderEliminarPero bueno....qué leo por aquí....que si pinchazo, que si paletilla, que si te rascan el bolsillo los nórdicos...Si no te tratan bien ya sabes....aquí te esperamos con los brazos bien abiertos...
ResponderEliminarAunque se que haya quejas es más bien un desahogo, porque los paisajes y las vistas que tienes son de merecer algún contratiempo. Qué recuerdos viendo esas fotos de esos lugares qué hace un tiempo lejano visité.
Hablando de desahogo...y de paletilla...pronto va mi amiga para allí y ya te arreglará la paletilla y lo que haga falta...
Por cierto, me consta muy mucho que tus amigos están bien despiertos, con los ojos bien abiertos y brindando por ti éste finde.
Qué disfrutes mucho de éstos días.
Se te quiere
Gracias amiga por acordarte de mi. Se agradecen las palabras.
ResponderEliminarMis amigos han estado despiertos y brindando pero me han dejao colgao....
La Aventura es lo que tiene, contratiempos y problemas, y luego los ratos Buenos, que son los que quedan.